Israel, Hamas, y la Estructura del Mal
Venganza en los niños
Nota del autor
La estructura social del mal se compone de los incentivos, las recompensas y el poder que los individuos y los grupos reciben por actos y leyes violentas, explotadoras y opresivas que privan a otros de la libertad, la seguridad y el control sobre sus propias vidas.
Tomemos la vista desde 30,000 pies de las estructuras sociales detrás de las recientes historias de horror y trauma que estarán con nosotros durante mucho tiempo.
El presidente Biden caracterizó el ataque en un discurso especial el 10 de octubre.
Los impactantes acontecimientos del ataque de Hamas contra Israel y sus atrocidades
Sabes, hay momentos en esta vida, y lo digo literalmente, en los que el mal puro y sin adulterar se desata en este mundo. ... Este fue un acto de pura maldad. ...
Los padres masacrados usando sus cuerpos para tratar de proteger a sus hijos. Informes que revuelven el estómago de bebés asesinados. Familias enteras asesinadas. Jóvenes masacrados mientras asistían a un festival musical para celebrar la paz, para celebrar la paz. Mujeres violadas, agredidas, desfiladas como trofeos.
– Presidente Joseph Biden, 10 de octubre de 2023
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, ordenó un "asedio completo" a Gaza, diciendo que las autoridades cortarían la electricidad y bloquearían la entrada de alimentos y combustible.
Jan Egeland, secretario general del grupo de ayuda Consejo Noruego para los Refugiados, advirtió que el asedio de Israel significaría un "desastre total" para los habitantes de Gaza. "No hay duda de que el castigo colectivo viola el derecho internacional", dijo a The Associated Press. "Si y cuando llevara a niños heridos a morir en los hospitales debido a la falta de energía, electricidad y suministros, podría equivaler a crímenes de guerra".
LeMonde, jueves 12 de octubre de 2023
Entre el 30 y el 40% de los heridos en los ataques aéreos contra Gaza son niños, dice un cirujano a CNN
Estructura social: el tejido de nuestras vidas
La historia, como se escribe normalmente, se centra en las hazañas de grandes hombres y algunas mujeres. Por lo general, pasamos por alto las fuerzas sociales y culturales más amplias que dieron lugar a los eventos que registramos. Nos centramos en Hitler y la aceptación alemana del nazismo sin mirar el Tratado de Versalles que puso fin a la Primera Guerra Mundial. Las devastadoras sanciones económicas y políticas convirtieron a Alemania en un terreno fértil para las voces del mal, que buscaban venganza y culpaban a los judíos de su derrota.
Las estructuras sociales, el patrón de relaciones que gobiernan nuestras vidas, son el agua que nosotros, como los peces, no vemos.
A menudo, estos patrones de opresión obran su mal no sólo en el ámbito social, sino también en el interior del alma. La depresión, la ansiedad, la adicción, las autolesiones y el suicidio son signos de una violencia interna más profunda (vuelta hacia adentro inconscientemente) o una rabia que abrasa la conciencia. La destrucción y el desplazamiento de los pueblos indígenas en los Estados Unidos y en todo el mundo, la esclavitud de los africanos para crear riqueza para amos brutales, la destrucción económica y social de los pueblos pequeños de Estados Unidos y la crisis de los opiáceos son todos los resultados de estructuras sociales que fueron creadas e impuestas por agendas culturales codificadas en la ley y la mano no tan invisible de la economía.
Se hicieron intentos de cambiar el mal estructural de las leyes estadounidenses de discriminación racial el sistema legal de “separadas pero iguales,” pero no antes de que se convirtieran en el modelo del sistema de exclusión racial de apartheid de Sudáfrica. Los esfuerzos de protección del medio ambiente –de hecho, los esfuerzos de supervivencia global– siguen enfrentándose a las estructuras económicas y políticas que apoyan a la industria petrolera de los combustibles fósiles.
"A pesar de que vemos que los efectos del cambio climático se multiplican a nuestro alrededor (olas de calor mortales, incendios forestales prolongados, inundaciones y sequías), las economías del mundo siguen subsidiando el precio de los combustibles fósiles. Esos subsidios al petróleo, al carbón, al gas natural, pues, suman casi 6 billones de dólares al año a nivel mundial. Al menos, eso es lo que dice un nuevo informe del Fondo Monetario Internacional".
- Audy Cornish, NPR All Things Considered, 11 de octubre de 2023
Israel y Palestina – Más que Bienes Raíces
Esa zona fertil en forma de media luna se coloca a la confluencia de Asia, África y el mundo mediterráneo que los romanos llamaban Palestina y los judíos llamaban Israel, no es sólo una entidad geográfica. Es sagrado para el judaísmo, el cristianismo y el islam. Los ejércitos conquistadores de los antiguos imperios a lo largo del tiempo redujeron el tamaño del reino del rey David (alrededor de 1000 a 962 a.C.), que cubría lo que hoy es Israel y Palestina. Cuando los romanos ocuparon Palestina en el año 63 a.C., era un pequeño estado formado por las tierras históricas de las tribus judías de Judá y Benjamín alrededor de Jerusalén. En ese momento, los judíos también vivían en Galilea, en el norte, en una sociedad más mixta. Jesús de Nazaret era galileo. La prolongada resistencia y la rebelión abierta contra el Imperio Romano resultaron en la destrucción de su templo y su pueblo en el año 70 d.C.
La tierra fue ocupada por otros y solo quedó un pequeño remanente. Los judíos siempre anhelaban regresar y celebraban la fiesta de primavera de la Pascua con el dicho: "En el año que viene (celebramos) en Jerusalén". El sueño era regresar al monte del santo templo llamado Monte Sión. La continua persecución y marginación del judaísmo por parte del islam y el cristianismo siguió porque consideraban el antisemitismo como un precepto divino aunque era equivocado. El movimiento sionista condujo al regreso del pueblo judío a Palestina a finales del siglo XIX y principios del XX. Esto requirió la resurrección del hebreo como lengua viva, ya que los judíos de todo el mundo no tenían una lengua cotidiana común. El hebreo era el idioma del culto religioso. Después de la Primera Guerra Mundial, el Imperio Otomano se desintegró. Gran Bretaña tomó el control de Palestina. Este régimen fue llamado el Mandato Británico.
El Holocausto - la matanza enorme de 6 millones de judios por Hitler - animó a los países del Occidente de ponerse en favor de que los judíos tuvieran su propia patria. El Estado judío proporcionaría refugio a los judíos de todo el mundo en el que podrían tener una estructura social favorable. Sería un Estado judío. La población árabe residente era resistente, si no hostil, a los inmigrantes judíos y a su objetivo de tener su propio Estado en Palestina.
Como parte del movimiento más amplio de la posguerra para desmembrar los grandes imperios europeos, el Mandato Británico se dividió en dos partes, Israel y Palestina, por una resolución de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de 1947. En mayo de 1948 ordenó el establecimiento de Israel y Palestina como estados separados. Jerusalén iba a ser una ciudad internacional que no pertenecía a ninguno de los dos estados. Los árabes rechazaron el plan porque no querían estar bajo el dominio judío en áreas que iban a ser parte del Estado de Israel ni perder su tierra ancestral.
Israel y Palestina - Piezas de Ajedrez
Las milicias árabes y las fuerzas judías clandestinas comenzaron a luchar. Las hostilidades a gran escala comenzaron en 1947. Después de que Israel declarara su independencia el 14 de mayo de 1948, fue atacado por ejércitos árabes del Líbano, Siria, Irak y Egipto. Arabia Saudita envió tropas que lucharon bajo el mando egipcio. Los israelíes prevalecieron con la ayuda de los británicos. Egipto retuvo el control de Gaza y Jordania controló Cisjordania.
En la guerra de 1967, Israel derrotó a Jordania, Siria y Egipto en lo que se conoce como la Guerra de los Seis Días, del 5 al 10 de junio. Después de un ataque sorpresa de Egipto, Siria y Jordania, la fuerza aérea israelí atacó rápidamente a la fuerza aérea egipcia en tierra y noqueó a las fuerzas aéreas de Siria en Jordania. En una semana, Israel derrotó a los tres ejércitos árabes y se hizo cuatro veces más grande. Israel se convirtió en la potencia militar más fuerte de la región, lo que creó una sensación de invencibilidad israelí.
La Guerra de los Seis Días fue un subproducto de la competencia estadounidense y soviética por la influencia en el mundo árabe. La guerra había sido precipitada por un informe falso de la Unión Soviética a Egipto y Siria de que Israel había concentrado tropas en la frontera de siria.
El conflicto actual con Hamas también tiene que ver con la influencia y las agendas de los países más grandes de la región. Arabia Saudita buscaba la creación de una alianza para oponer uma creciente zona de influencia iraní en el Medio Oriente y Asia Central. El apoyo de Irán a los rebeldes hutíes en Yemen, vecino de Arabia Saudita, ha sido un irritante. Habían conversaciones entre Los Estados Unidos, Arabia Saudita e Israel sobre la normalización de las relaciones diplomáticas. Esto implicaría el reconocimiento de Arabia Saudita de Israel y su derecho a existir. También significaría el fin de las aspiraciones palestinas de tener su propio Estado y la esperanza de terminar la ocupación israelí. En el momento de escribir este artículo, no se ha confirmado la participación iraní en los ataques de esta semana. Sin embargo, parece que Irán estaba tan sorprendido como Israel y Estados Unidos.
Trágicamente, la sangre y las atrocidades de este conflicto actual no son nada nuevo en la región. Sigue siendo una zona de gran inestabilidad política, incluso dentro de Israel y sus vecinos árabes.
La visión de una estructura social de esperanza
¿Hay alguna manera de cambiar estos arreglos estructurales que precipitan actos individuales y colectivos de pura maldad? La solución y el estímulo requieren una mirada enfocada a los eventos exitosos. Al final de la Segunda Guerra Mundial, los vencedores no repitieron los errores del Tratado de Versalles que puso fin a la Primera Guerra Mundial. En lugar de aplastar o colonizar Alemania y Japón, la política consistía en ayudarlos a recuperarse y convertirse en democracias. Claramente, la absorción de Europa Central y Oriental en la Unión Soviética fue un factor. La reforma de las estructuras sociales en una Europa occidental derrotada, la creación del Mercado Común Europeo y, más tarde, de la Unión Europea, crearon un entorno actual en el que Francia y Alemania trabajan en estrecha colaboración. Más importante, desarrolló un entorno que desempeñó un papel importante en la disolución pacífica de la Unión Soviética. Hubo intentos exitosos de incorporar a Rusia y a las exrepúblicas soviéticas a una red euroasiática mayor hasta que Putin invadió Ucrania por segunda vez en 2023 para anexionarse el país como parte de Rusia. (Rusia tomó Crimea y las provincias orientales de Donetsk y Luhansk en 2014 sin oposición efectiva). La OTAN ha ayudado a frustrar el intento de Rusia de apoderarse de todo el país de Ucrania.
El movimiento no violento también ha desempeñado un papel central en la superación de la estructura social del mal. Las sufragistas británicas que luchaban por el voto de las mujeres llevaron a cabo un programa no violento de protesta y huelgas de hambre y superaron una tremenda oposición para ser reconocidas como seres humanos legalmente autónomos. La campaña no violenta de Gandhi por la independencia de la India dio sus frutos, aunque la lucha fue muy violenta. Martin Luther King, Jr. y otros líderes de los derechos civiles adoptaron las tácticas de no violencia de Gandhi para obtener derechos civiles para los afroamericanos. César Chávez y los líderes latinos utilizaron un enfoque no violento similar en sus esfuerzos por lograr la igualdad y la justicia. La no violencia también ha tenido éxito para los pueblos indígenas en los Estados Unidos y en todo el mundo.
Por supuesto, estos esfuerzos han sido sangrientos. Las imágenes lo dicen todo: hombres, mujeres y niños mordidos por perros de ataque, golpeados por palos, gases lacrimógenos, gravemente heridos por el agua a alta presión de las mangueras contra incendios.
Hubo muchas batallas en las legislaturas y los tribunales que no siempre tuvieron éxito, pero que prevalecieron después de décadas. Los libros, los discursos, la composición musical, las bellas artes proporcionaron y reforzaron nuevos arreglos sociales y solidarios. La estructura social del bien, la creencia de que podemos despertar en una mañana mejor, no es un camino fácil.
En las circunstancias actuales, es necesario reducir la tensión, Es preciso ayudar a los palestinos atrapados en Gaza hasta que reestablezca el poder eléctrico y el agua. Además, tenemos que abogar por la creación de corredores de paso seguro para que salen los refugiados y entra la asistencia humanitaria. Un asalto militar por parte de Israel conduciría a una guerra urbana calle por calle en la que no habría un claro vencedor. La destrucción de distritos enteros en Gaza significaría la muerte de un gran número de mujeres, niños y adolescentes, ya que el 50% de los palestinos -aproximadamente 1,15 millones de personas- tienen menos de 20 años.
A pesar de lo horrendos que fueron los ataques contra los colonos Israelís, se consideraron parte de una política de asentamientos que privaba a los palestinos de sus terrenos y medios de subsistencia. Dos millones de personas que viven en una prisión al aire libre iban a explotar en algún momento. Los planes actuales exigen la derrota de Hamas, pero tratar de derrotar a un movimiento es, en el mejor de los casos, inútil. Los palestinos no tienen adónde ir. Cisjordania se está volviendo inquieta. Se teme que Hezbolá, otro poderoso grupo islamista en el Líbano y Siria, pueda entrar en las hostilidades.
La continua privación de alimentos, agua y electricidad a los palestinos de Gaza son crímenes de guerra según el derecho internacional. A partir de hoy, 13 de octubre de 2023, los israelíes han advertido a los palestinos -2,3 millones de personas- que evacuen las partes del norte de Gaza que serán invadidas. Esto no se puede hacer ya que no hay combustible, electricidad ni transporte y grandes partes de Gaza que es del tamaño de Manhattan y una de las zonas más densamente pobladas del mundo, Participar en tal brutalidad le costará a Israel un apoyo significativo en Europa y Los Estados Unidos.
A partir de marzo de 2023, la población de Israel es de 9,73 millones La comunidad árabe dentro de Israel es aproximadamente el 21% de la población o alrededor de 2 millones de personas. Hay alrededor de 5 millones de árabes en territorios en disputa. Esta disparidad poblacional debe inquietar a Israel. Las tendencias no son tranquilizadoras para Israel, ya que la tasa de natalidad palestina es de aproximadamente 3,6 en comparación con la de 2,9 de Israel. Si Israel incorporara a los palestinos, lo que ha hecho hasta cierto punto, y se les concedieran derechos plenos e iguales, Israel dejaría de ser un Estado judío. Debido a la diferencia en las tasas de natalidad, los árabes se convertirán en la mayoría y potencialmente controlarán el gobierno de Israel. Desgraciadamente, los disturbios y la violencia no cesarían en un país con dos grupos tan radicalizados y endurecidos,
El desafío es ser una fuerza para el bien y no para el mal absoluto. No damos testimonio eligiendo un lado sobre el otro. Damos testimonio adoptando posiciones en nuestras redes sociales que promueven la desescalada y contrarrestando las narrativas falsas que demonizan a los palestinos o a los israelíes. La furia de ambas partes no disminuirá rápidamente, pero podemos apoyar a las agencias internacionales de ayuda. Y lo que es más importante, podemos vigilar las leyes, las políticas y las iniciativas que intensificarían las estructuras sociales que promueven el mal y trabajar por esas relaciones y estructuras que promueven la paz. Una de las grandes ventajas de la defensa de la paz en la era digital es que podemos hacerlo en pocos minutos desde nuestras casas.
Las soluciones no serán fáciles, pero como primer paso podemos proteger el futuro. Podemos proteger a los niños. Donar al Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas
Cómo ayudar con los esfuerzos humanitarios en Israel y Gaza
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